Si la profesión de psicólogo te mantiene anclado en un lugar concreto has de saber que ya no es así con la terapia en línea. ¿Por qué no amplías tu área de acción? Si la mayoría de tus pacientes viven a 30 minutos de su consulta, esto podría cambiar. Con la terapia en línea, cualquier persona puede ser tu paciente: pacientes de Birmania, Ginebra, Miami o Italia. Este nuevo tipo de terapia le permite una mayor movilidad y enriquecimiento cultural.
¿Quieres más? El profesional también puede ser que se mueve y continuar trabajando incluso cambiando de país. ¿Necesitas una estancia fija durante la terapia? Aparte de con el móvil también puedes conectarte en una biblioteca.
¿Qué está cambiando la terapia en línea?
La mayor diferencia es que ya no es posible poner una mano en el hombro de un paciente, aunque esto rara vez sucede. En la terapia en línea, es esencial ser más cuidadoso con la palabra.
En la terapia en línea, también es más fácil para un profesional capturar momentos de la vida del paciente como es ver directamente la intimidad del hogar, lo que puede ayudar en las sesiones.
Por otro lado, cara a cara desde una pantalla, es importante enfocarse, por lo que la mente escapa menos que en un gabinete, aunque debemos tener en cuenta saber cómo administrar la herramienta, para cuestionar el marco y los límites de la terapia en línea para redefinir las reglas de este tipo de terapia.
